Ball’s Pyramid es una pequeña isla rocosa situada en la costa sureste de Australia, aproximadamente a 25 kilómetros del continente más cercano. Con su pico que supera los 150 metros de altura, este accidente geográfico es el pinnáculo más alto de la cordillera Norfolk, una cadena de islas que incluye a la Isla Norfolk y las Islas Lord Howe.Desde hace miles de años, Ball’s Pyramid fue habitada por los aborígenes de Norfolk, quienes utilizaban la isla como lugar de caza y recolección. Sin embargo, debido a la poca disponibilidad de agua dulce y su ubicación remota, el contacto con este lugar se perdió durante mucho tiempo.En 1802, un explorador inglés llamado John Pembroke llegó a esta isla y fue el primer europeo en tener conocimiento de ella. Durante los siguientes dos siglos, pocas personas han visitado la isla debido a su ubicación inaccesible y peligrosa.En 2006, se envió una expedición para investigar la vida que había sobre Ball’s Pyramid. Los investigadores no encontraron ningún signo de vida, excepto los de algunos científicos que habían pasado por allí en el siglo XIX. A pesar del esfuerzo por encontrarla, no se encontró ninguna traza de la vida que había existido allí durante tanto tiempo.La isla ha sido declarada como un parque nacional marino y terrestre, pero su acceso está restringido debido a la presencia de numerosas serpientes venenosas y otros peligros en la región. Más recientemente, se han encontrado restos de vida en Ball’s Pyramid, como pies de camarones y alguna aves marinas, pero el misterio sobre si existe vida en la isla aún persiste.
La isla fantasma de Ball’s Pyramid




